Las diferencias que pueden existir entre los hermanos, nadie mejor que la Madre las puede suavizar y aun hacer desaparecer.
Si los cristianos no hemos logrado aún la unidad que nos pide el Evangelio y que hasta el mundo no creyente reclama de nosotros, es porque no hemos tratado de unirnos en nuestra Madre común.
El Concilio ha centrado el culto y la devoción a María en el misterio de Jesús y de la Iglesia, pueblo de Dios. Cuando peregrinamos bajo la protección consciente de María, caminamos hacia la unidad; todo lo que hagamos por difundir el amor y la devoción a Maria, según la orientación del Concilio, será siemba de unidad.
==MADRE Y VIRGEN, QUE ENGENDRASTE AL CREADOR, SE TÚ EL PUNTO DE UNIÓN DE DIOS Y DEL HOMBRE Y DE TODOS LOS HOMBRES ENTRE SÍ==
Padre Nuestro...
Ave María...
Gloria...
(Padre Alfonso Milagro)
http://loscincominutosdemaria.blogspot
No hay comentarios.:
Publicar un comentario