==UN MINÚTO CON MARÍA==

7 DE MAYO, 2024

"Maratonista, corre por María"

Lo que quiere hacer este maratonista de la fe no es un simple ensayo. A sus 78 años, Ulderico Lambertucci, italiano, se lanza a lo que llama su “gracias a María”. Quiere dedicar esta peregrinación como ninguna otra a la Virgen María para agradecerle que “siempre lo ha acompañado y sostenido”. Habiendo salido de Loreto el 24 de febrero, llegó a Lourdes el 24 de marzo de 2024, Domingo de Ramos, corriendo en etapas de aproximadamente 60 kilómetros por día.

Un reto que parece fuera de lo común, pero que Ulderico Lambertucci ya había logrado en 2002. Apoyado por la asociación deportiva amateur ColleMar-athon de Fano, aprovechó las diferentes etapas para llevar un mensaje de fe y de paz, visitando las principales santuarios marianos en su camino. 

Este entusiasta de la carrera descubrió su vocación deportiva a una edad avanzada. Fue en 1995 que comenzó su prolífica carrera como corredor. En el año 2000, inscribió su nombre en el libro Guinness al completar 46 maratones en un solo año.

Acostumbrado a carreras largas, este ex albañil y luego contratista de obras no se deja intimidar y quiere combinar su fe con su intensa práctica deportiva. En 2006, unió Macerata en Italia con Beijing en China, en homenaje al sacerdote misionero del siglo XVI Matteo Ricci. Recorrió más de 12,000 km. En 2008, Ulderico Lambertucci reunió las dos ciudades santas de Roma y Jerusalén para transmitir un mensaje de paz, alentado por el papa Benedicto XVI. Cuatro años después, cruzó Estados Unidos y corrió más de 4600 kilómetros entre San Francisco y Nueva York.

Su devoción a la Virgen María también se revela a través de estas peregrinaciones. Después de Loreto-Lourdes en 2002, recorrió los aproximadamente 3000 kilómetros entre los santuarios de Fátima y Loreto vía Santiago de Compostela. Esto lo hizo al año siguiente. En 2004, unió Roma y el Santuario de la Virgen Negra de Czestochowa en Polonia, a lo largo de 1900 kilómetros.

A sus casi 80 años, Ulderico Lambertucci se ha vuelto a calzar las zapatillas para vivir un extraordinario viaje cuaresmal.