El recuerdo de la madre siempre es tranquilizador, pero cuando esta Madre es Maria, la paz inunda nuestra alma, la sonrisa aflora a nuestros labios, la alegría penetra a nuestra vida. Piensa, pues, con frecuencia en María, tenla presente en todos los momentos de tu vida, invócala sobre todo en los tramos más difíciles y comprometidos. ==SI VAS CON ELLA, NO PERDERÁS EL RUMBO==
"Los cinco minutos de Maria"
sábado, 20 de octubre de 2018
==ORACIONES MARIANAS DE SS. JUAN PABLO II==
¡Dichosa Tú que has creído! (cf. Lc 1, 45)
Siervo de Dios SS. Juan Pablo II
Homilía. Santuario Mariano de Chiquinquira, Colombia 3-VI-1986
¡Dichosa Tú que has creído! (cf. Lc 1, 45)
Como peregrino a tu santuario de Chiquinquirá, me postro ante Ti, oh Madre de Jesús, pronunciando las palabras con las que te saludó Isabel, la esposa de Zacarías, en el umbral de su casa.
¡Dichosa Tú, que has creído!
Dichosa, porque a impulsos de tu fe, en respuesta al anuncio del Angel, acogiste en tu seno la Palabra del Dios vivo.
Dichosa Tú por haber pronunciando aquel bienaventurado “fiat” que te convirtió, por virtud inefable, de Sierva del Señor en la Madre del Verbo Eterno: Dios de Dios, Luz de Luz, hecho hombre en tus entrañas virginales. ¡El Verbo se hizo hombre!(cf. Jn 1, 14).
¡Dichosa Tú, porque gracias a tu acatamiento de la Palabra de Dios, se cumplió, ya en la plenitud de los tiempos, el acontecimiento más señalado por los profetas para la vida y para historia de la humanidad: “El pueblo que andaba en tinieblas, vio una luz grande” (Is 9, 2): tu Hijo Jesucristo, el Hijo del Dios vivo, el Redentor del hombre, el Redentor del mundo!
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