"Los cinco minutos de Maria"

"Los cinco minutos de Maria"
Textos tomados del Libro "Los cinco minutos de María" del Padre Alfonso Milagro.

miércoles, 19 de mayo de 2021


 

==UN MINÚTO CON MARÍA==

20 DE MAYO, 2021


"María es una perfecta confidente, pero no solo eso…"


Para ser honesto, tanto en mi infancia como en mi adolescencia, nunca tuve una gran devoción a la Santísima Virgen. El culto mariano, en mi familia, siempre ha sido un asunto de mujeres. Los hombres, quizás por modestia, éramos más reservados y permanecimos más centrados en Dios Padre.

Pero, cuando llegué a los cursos de khâgne1 en París, debido a cierta soledad, me refugié en un altar de la Virgen, en el fondo de una conocida iglesia del 5º distrito. Debo decir que le conté muchas cosas, en la penumbra, frente a su magnífica estatua. Alegrías, tristezas, desalientos, agradecimientos. Ella fue para mí una perfecta confidente.

Tengo todavía algo mejor que contar. Más tarde, cuando comencé a escribir apologética, me di cuenta de una cosa asombrosa: cada vez que debía escribir sobre un dogma mariano, retrocedía, diciéndome que había demasiadas maravillas en todo esto como para que la razón pudiera explicarlo. Digamos que comencé derrotado. Y bien, siempre escribo el capítulo con mucha facilidad, los argumentos caen por su propio peso y, al final, todo encaja a la perfección.

¡Aunque realmente yo no tengo nada que ver al hacerlo! No siento que esté escribiendo algo que entendí previamente, sino, más bien, que lo entiendo mientras lo escribo. Es una experiencia muy peculiar. Por ejemplo, pronto tendré que escribir algo sobre si a María se le puede llamar "corredentora", un tema muy espinoso. Francamente, desde un punto de vista puramente racional, filosófico y teológico, no comienzo con mucha confianza. Pero, instruido por la experiencia, todavía tengo grandes esperanzas: todo se desenredará. ¡Los nudos serán desatados!

 

1. Khâgne: Segundo año de las clases preparatorias al concurso de  la Escuela Normal Superior (ENS) (en el área de Letras), con sede en Paris.

 

Testimonio. 

Frédéric Guillaud

No hay comentarios.:

Publicar un comentario