Cuando el Espíritu Santo desciende sobre los apóstoles el dia de Pentecostés, los encuentra arracimados en torno de María, todos ellos con María eran el racimo unido y compenetrado con Dios para salvarlo, eran la espiga integrada por todos aquellos granos destinados a formar la Hostia de la Eucaristía.
María era el elemento de cohesión, la que apretaba los granos e impedia su disgregación.
Hoy como ayer María sigue siendo elemento de unión, no te alejes de ella y no te alejarás de tus hermanos, seguirás formando ese racimo y esa espiga en que hallarás tu salvación.
==MADRE, PROTÉGENOS DE PLATEAR SIN REALIZAR, DE HABLAR SIN VIVIR, DE REZAR SIN ORAR==
Padre Nuestro. . .
Ave María. . .
Gloria. . .
(Padre Alfonso Milagro)
http://loscincominutosdemaria.blogspot
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